por Alonso Núñez del Prado S.(*)
Pareciera, a veces, que los medios y la prensa son cómplices de los políticos. ¿Han visto cuanto espacio les dedican a las ofertas electorales y cuánto a su cumplimiento? Resulta entonces que en realidad les hacen el juego y no cumplen con su labor de fiscalización. Al final, se trata de vender y parece que recordarles a los gobernantes que están obligados a cumplir con lo que ofrecieron, que la palabra empeñada debe tener algún valor en especial en los hombres públicos, no vende mucho. Mas no se trata sólo de los medios, sino también de la clase política que pareciera considerar que es mejor no reclamar, porque de repente ocurre algo similar cuando les toque el turno de estar en el poder.